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Arquitectos: Matharoo Associates
- Área: 848 m²
- Año: 2018
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Fotografías:Dinesh Mehta, Edmund Sumner
Descripción enviada por el equipo del proyecto. El terreno, situado en la ciudad costera de Surat, forma parte de una tranquila comunidad suburbana cerrada, aunque única, ya que carece de muros intermedios. Aparte de las generosas vistas a un gran jardín comunitario compartido en el sur, el sitio está dominado por apartamentos altos y una casa vecina en los lados norte y este. Nuestra intervención consistió en crear un proyecto que diera la espalda a estos edificios vecinos y se abriera hacia la zona verde existente, ampliando así el paisaje.
Situado en una zona con suelo de algodón negro, era imprescindible contar con unos cimientos profundos. Esta profundidad, que de otro modo no se utilizaría, se ha convertido en un sótano para albergar una serie de funciones, que incluyen enfermería, un espacio de meditación, un templo, un gimnasio, una sala de actividades y almacenes, además de zonas para el personal. Se reduce considerablemente la huella y la masa sobre el suelo, para lograr una escala más humana.
El centro de la casa se abre para acoger la zona de estar de la familia. Animada por un tragaluz, la luz cambia a lo largo del día y de las estaciones en los muros concéntricos de hormigón que encierran este núcleo. Los muros están colocados en arcos de diferentes radios, proporcionando los niveles deseados de cerramiento. Lo original de esta composición es el muro que puede moverse para separar o conectar las zonas privadas y públicas que flanquean el núcleo, y el interior con la naturaleza exterior, todo al mismo tiempo.
Todas las demás zonas de la casa orbitan alrededor de este núcleo. La escalera que recorre el muro curvo conduce a las plantas superiores y hace las veces de biblioteca. Conecta directamente con cada una de las zonas de descanso superiores a través de sus mínimos rellanos, eliminando la necesidad de pasillos. Por lo tanto, los espacios debían distribuirse estratégicamente y los volúmenes debían entrelazarse deliberadamente en escalas reducidas, para unir la casa a través de esta única escalera.
Los muros del exterior adoptan la forma de planos independientes de hormigón, unidos por finas cortinas horizontales. El suelo de terrazo, colocado a mano, se vierte sobre los alféizares y los dinteles, y fluye por encima de estos salientes, manteniendo la separación entre los planos de hormigón y formando un vínculo adicional entre el interior y el exterior de la casa.
Los pasillos de la vivienda son sustituidos por el núcleo -que da oportunidad a la interacción- donde las tres generaciones de la familia deben encontrarse por defecto. En una época en la que la antigua tradición de la vida familiar conjunta se está desintegrando, la casa intenta conservar los estrechos lazos familiares.